sábado, 26 de mayo de 2012

Cincuenta años camino de la Ermita



En los pasados cultos del triduo, se celebraba el L aniversario de la primera vez que el Rosario de la Aurora se dirigió desde la Parroquia hasta el Santuario de la Divina Pastora, erigido en el pago de los Pajares. Anteriormente este tradicional Rosario instituido por el padre Claudio de Trigueros recorría las calles de la población regresando nuevamente a nuestra sede canónica.
En 1952 tenía lugar el primer Rosario de la aurora que salió en aquella ocasión a las seis de la mañana los dos primeros días del triduo. Fue diez años después cuando se establece la costumbre de llegar con el Rosario hasta los Pajares, celebrando la Eucaristía en la Ermita Pastoreña. Desde entonces esta tradicional celebración se ha venido manteniendo hasta nuestros días, viviendo años de más concurrencia y otros de declive como los últimos años de la década de los ochenta, aunque el grupo joven de la Hermandad luchó por mantenerlo, volviendo a recobrar el esplendor de antaño, concurriendo gran cantidad de personas en la durante los noventas. Llegó a contar algunos años en la década de 1970, con elementos impropios como el tamborilero característico de nuestra simpar romería.
En el 2004 el coro de la Hermandad interviene en el mismo recuperando las “rosas del alba”, coplas de campanilleros compuestas por fray Gonzalo de Córdoba. No podemos dejar de reseñar que en 1995 se celebró por las calles del pueblo, tras finalizar el último día del triduo debido a los actos y cultos extraordinarios que se celebran con motivo del CCLXXV aniversario fundacional; y el 2002 en que se llevó el Simpecado en la carreta de plata, convirtiendo la peregrinación en una romería extraordinaria con la cual se conmemoró el L aniversario de la Romería, los misterios fueron cantados en distintos puntos del recorrido por el pueblo hasta Martín Rey.
Aunque a nuestra junta de gobierno se le ha pasado por alto estas efemérides, queremos recordala en este blog y a la vez recordar a todos los pastoreños la importancia de mantener vigente este culto con el cual imploramos a María, nuestra Pastora, en el mes que la Iglesia le consagra.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Se pasan por alto tantas cosas.....
Gracias a los administradores de este blog, que mantienen vivo nuestro interés por lo verdaderamente pimordial.