En el mismo vemos a la Divina Pastora sin sombrero, con sus atributos caracteristicos de los días más señalados: joyas del XVIII, báculo y diadema de oro y piedras preciosas. Sobre la Imagen de la Virgen, aparece el monumental arco efímero conmemorativo de la efemérides bajo el cual se le impuso a la Virgen el regalo de sus hijos, aquel memorable 8 de Septiembre de 2003, a modo de una banderola con los colores propios de nuestra Hermandad adaptándose a la esquina de la casa en la que se adosa aparece la siguiente inscripción:
“A la Divina Pastora, Honra y Gloria de esta Villa, le consagran sus hijos esta cerámica para perpetuar la memoria del acto histórico y multitudinario que tuvo lugar en esta plaza el 8 de septiembre de 2003 durante el cual, el M. R. P. Fray Juan Jesús Linares Fernández, Ministro Provincial de la Orden Capuchina en Andalucía, impuso a la Imagen de la Santísima Virgen, bajo un monumental arco de triunfo, el cayado de oro y piedras preciosas, ofrenda del pueblo a su Reina y Protectora, con motivo del III centenario de esta advocación mariana. 1703 – 2003”.
En la parte inferior una ménsula con el escudo de la Villa y otra leyenda en la que se puede leer un verso de la antigua copla de novena conocida como “la pradera”… utilizada para conmemorar el III centenario: ¡BENDITA LA HORA EN QUE EL MUNDO TE VIO! La Virgen aparece enmarcada en una espesa guirnalda de laurel y lazos rojos. Fue realizado por nuestro hermano Luis M. López Hernández, licenciado en Bellas artes y autor, como todos sabemos, del diseño del cayado de oro, faldones del paso, estandarte corporativo, etc. Autor también de las imágenes del Belén monumental de la Ermita y de las ovejas y el San Miguel que acompañan a la Virgen tanto en el camarín como en el paso.
Ilumina este grandioso retablo cerámico un antiguo farol de forja, el azulejo fue íntegramente costeado por una devota Pastoreña, Pastora de la Hera Sayago, viuda de Antonio Duran; y desde aquel 8 de Septiembre en que fue bendecido preside la plaza del Llano. Ese mismo año también se contó con la visita durante la Solemnísima Función principal, de D. Tirso de Olazábal y Ruiz de Arana, XIII Conde de Cantillana, quien inauguró otra cerámica en las dependencias de la Hermandad frente a la parroquia, continuando así con la vinculación de la institución cantillanera más importante con la mencionada casa condal.
Foto: Retablo cerámico
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