Se trata ésta de una obra de 1958 salida de los afamados talleres trianeros de Ramos Rejano y la firma el artista Alfonso Chaves Tejada, autor también del retablo cerámico de la Divina Pastora de la fachada de la parroquia de Cantillana. Como en aquél, la factura de la imagen de la Virgen es magnífica, estando muy conseguidos el rostro y la simulación de los estofados de la talla. Rodea a la imagen el rebaño de hermosas ovejas que pacen en el bucólico paisaje a la sombra del típico almendro en flor, elementos iconográficos reconocidísimos, como estamos viendo desde esta sección, de la Divina Pastora de Cantillana. Se introduce también en la composición, como no podía ser de otra forma tratándose de la cerámica que preside el paraje de la romería, la figura del Niño Jesús vestido de Pastor, que como en el caso del lienzo del interior se representa en un primer plano, a la derecha de la Virgen, y ataviado también de zahones, pellica y un pequeño báculo a semejanza del de la Madre, curiosamente introducido por el artista, pues hasta el año 1995 no tuvo el Pastorcito un báculo o cayado de estas características.
Sus dimensiones son 195 x 120 cm. Enmarca la colorida escena una bella cenefa de estilo barroco con óxidos azules y naranjas que en su parte inferior ostenta una cartela con la leyenda AVE MARÍA.
Antonio López Hernández
Foto: Retablo ceramico
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