Sevillanas de las niñas de Martin Rey de 2005

I
No hay nadie que pueda quererte
como te quiero, Pastora,
ni nadie que sienta lo mismo
que siento por tu persona,
cuando te tengo delante
como te tengo yo ahora.

Soy Pastoreña
de Cantillana,
y a tó las horas,
mi corazón va latiendo
por ti, Divina Pastora.

II 

De par en par se abrieron puertas
y repicaron campanas,
Y al cielo volaron cohetes
y se rompieron gargantas,
que la Divina Pastora
ya va a salir de su casa.

Y los tambores
con el gentío
al Cielo claman,
que se va de Romería
la Reina de Cantillana.

III 

Hoy en tu Carreta florecen
los nardos y las azucenas,
Y entre tantísima flor blanca
me pareces más morena,
sonríe haber si le quitas
a Cantillana la pena.

Porque no quiere
que tu te vayas
de Romería,
porque te alejas, Pastora,
Y la dejas triste y vacía.

IV 

Quizás porque yo llevo sangre
de unos padres pastoreños,
porque un día yo seré Madre
como tú eres de mi pueblo,
será por eso, Pastora,
que eres lo que yo más quiero.

Me enamorastes
desde el momento
que vi la vida,
Y te querré hasta que muera
a ti, Pastora Divina.

Antonio Portillo Daza.