Cinco años esperando
hasta que vuelvas otra vez,
cinco largas primaveras
que no pueden florecer.
Que no pueden florecer
que vacía está la Ermita,
que solo el río Viar
y los caminos que tristes
hasta que vuelvas a pasar.
II
Los cinco años se fueron
Pastora de mi querer,
la niña que yo quería
es ahora mi mujer.
Es ahora mi mujer
y tenemos un chiquillo
del fruto de nuestro amor
pediremos al pastorcito
que le dé su bendición.
III
Como un viento de esperanza
cinco años pasaran,
cinco espinas de silencio
dentro del alma “clavá”.
Dentro del alma “clavá”
el tiempo a nadie le importa
lo que importa es el saber
que otra vez, Pastora mía,
te volveremos a ver.
que vacía está la Ermita,
que solo el río Viar
y los caminos que tristes
hasta que vuelvas a pasar.
II
Los cinco años se fueron
Pastora de mi querer,
la niña que yo quería
es ahora mi mujer.
Es ahora mi mujer
y tenemos un chiquillo
del fruto de nuestro amor
pediremos al pastorcito
que le dé su bendición.
III
Como un viento de esperanza
cinco años pasaran,
cinco espinas de silencio
dentro del alma “clavá”.
Dentro del alma “clavá”
el tiempo a nadie le importa
lo que importa es el saber
que otra vez, Pastora mía,
te volveremos a ver.
IV
Nunca fue a la romería
ese que descalzo va,
va llorando como un niño
sin poderlo remediar.
Sin poderlo remediar
va cumpliendo una promesa
que su madre prometío,
y antes de los cinco años
el Señor se la llevó.
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