La carreta, cedida esos años por la hermandad del Rocío de Sevilla, lleva el simpecado blanco y está llegando al llano de Los Pajares, donde se estaba levantando entonces la ermita. Delante de ella aparece el boyero Antonio Caro, que lleva la yunta propiedad de su hermana Concha Caro, pastoreña recordada por sus poemas y letrillas populares, nacidos de su improvisación y nutridos de todos los acontecimientos de la hermandad. La fotografía data de 1958.
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